El sistema de Cubiertas Ajardinadas es sencillo. En el caso de zonas no muy lluviosas es necesario regarlas a menudo para poder mantener su vegetación. Cada litro de agua evaporado produce 0,64Kw/h de enfriamiento. El objetivo es enfriar la edificación en los mese cálidos y garantizar el perfecto estado de la masa vegetal en invierno para optimizar el aislamiento.
De forma rápida se resume en una capa impermeable, una capa retenedora de agua, una capa filtrante, el sustrato (que varía de las especies a implantar) y la vegetación.
A continuación se describe una sección tipo de una cubierta vegetal, en la que se puede distinguir las partes:
En zonas menos lluviosa, se puede colocar un sistema de riego hidroporoso, que aporte la cantidad precisa de agua que necesita la cubierta, sin que haya pérdida por percolación, el agua debe repartirse por toda la superficie de la cubierta de forma uniforme, maximizando la eficacia en la hidratación de las plantas, es de esta forma como la evapotranspiración optimiza la función aislante de la cubierta en invierno y crea un efecto de refrigeración en verano.
La vegetación que se recomienda es de tipo extensivo: especies de Sedum, herbáceas, gramíneas, aromáticas y vivaces en general, obteniendo como resultado una cubierta de bajo coste y mínimo mantenimiento. En casos más complejos, se puede integrar un sistema de reutilización de agua de lluvia y de aguas residuales de la edificación de manera que le consumo de agua corriente sea mínimo.